30 de noviembre de 2006

Llegó diciembre con su alegría...

Me acuerdo cuando vivía en la finca de mi abuelo Manuel. Nos reuníamos todas las muchachas de la vereda. Dejábamos que los muchachos se acercaran. No me dirán que no era un buen pretexto en aquellos tiempos. Todo listo el 16 de diciembre para cantar en las novenas.

Les cuento que yo no soy creyente, pero mis padres si lo eran y yo también en aquel entonces -la religión yo no la escogí- pero también les cuento que recuerdo con mucho cariño aquellas fechas por lo que social y familiarmente significaban. Eran días para sacar la alegría del cuerpo, para hacer comitivas alrededor de un fogón de leña, una enorme olla y un gran mecedor de palo para menear la natilla, mientras que otras y hasta ellos hacían los buñuelos.

Terminada la tarea se colocaba la natilla en platos con sus respectivos bueñuelos, se tapaban con un servilleta de algodón. ¡A comer! y que no faltase ese ¡Vaya mija llévele este platico a misía Carmen!

Porque además de colectivizarse el divertido trabajo se compartía con las vecinas los sabrosos resultados.

Los juegos con apuestas por cosas sencillas también eran variados: que si dar y no recibir o pajita en boca, que si a estatua o beso rabado.

Pero amigas y amigos, no es que no quiera que los tiempos cambien, pero que sean para avanzar en el binestar, no para hacernos esclavos del consumo, es decir, mucho trabajar para comprar y comprar y no disfutar.

Y recordando que en esta sección me piden que recomiende, pues si, si que voy a aprovechar para recomendarles no que regresen a la piedad sino que recuperen el espíritu de colectividad, de alegría y solidaridad. ¿Por qué no piden a sus abuelas y abuelos o a sus padres que les eneseñen aquellos juegos perdidos. Les juro que no necesitan comprar nada para divertirse con ellos.

30 de octubre de 2006

El pantano de San Juan. !Qué tiempos aquellos!


Dirán que estoy vieja. A lo mejor tienen razón, pero tampoco hace tanto tiempo que iba de paseo al pantano de San Juan con toda la familia cuando emepezaba el veranito. Estoy hablando de hace quince años.
Pasé hace dos semanas con mi amigo Jorge, camino de las fiestas del vino en Cenicientos y esto fue lo que nuestros asustados ojos vieron. La verdad, no sé porque tanto impacto porque, ¿qué podríamos esperar con esta falta de lluvia, este montón de empresas y capitalistas que destrozan salvajemente el ecosistema, estos políticos que sólo aspiran...? Creo que me estoy calentando y no es el día, ni este el momento.
¿Recuerdan cuando había playas, embarcadero, se podía nadar, pescar, practicar piraguismo y navegación?
Dejo a unas y otros con lo que vimos, mejor, con lo que captó la cámara de Jorge R.

El pantano de San Juan. !Qué tiempos aquellos!


Dirán que estoy vieja. A lo mejor tienen razón, pero tampoco hace tanto tiempo que iba de paseo al pantano de San Juan con toda la familia cuando emepezaba el veranito. Estoy hablando de hace quince años.
Pasé hace dos semanas con mi amigo Jorge, camino de las fiestas del vino en Cenicientos y esto fue lo que nuestros asustados ojos vieron. La verdad, no sé porque tanto impacto porque, ¿qué podríamos esperar con esta falta de lluvia, este montón de empresas y capitalistas que destrozan salvajemente el ecosistema, estos políticos que sólo aspiran...? Creo que me estoy calentando y no es el día, ni este el momento.
¿Recuerdan cuando había playas, embarcadero, se podía nadar, pescar, practicar piraguismo y navegación?
Dejo a unas y otros con lo que vimos, mejor, con lo que captó la cámara de Jorge R.

6 de octubre de 2006

Sopa mexicana

La comadre Olga que no es mexicana sino paisa de pura cepa como dicen allá en Manizales en plena zona cafetera de Colombia, se animó al conocer la sección de esta abuela y aqui tenemos el resultado.
Misiá Olga, muchas gracias.



Para 10 personas

INGREDIENTES:

5 pechugas de pollo
3 cebollas de huevo grandes
2 zanahorias grandes
16 tomates maduros
1 pimentón rojo
1 bouquet garní (cilantro, perejil laurel y tomillo frescos )
2 tazas de crema de leche agria
1 limón
2 aguacates pelados y partidos en cuadritos
1 taza de queso blanco rallado
½ taza de cilantro picado
aceite de oliva
vinagre blanco
sal y pimienta
ají tabasco
¼ de taza de salsa de tomate
3 paquetes grandes de maicitos

PASOS A SEGUIR

1. Aliñar las pechugas con cebolla rallada, salsa inglesa, sal y pimienta

2. Cocinar el pollo con 15 tazas de agua. Cuando esté bien cocido se retira del agua y en este caldo se ponen a cocinar las zanahorias, 2 cebollas partidas en cruz, 10 tomates pelados, el pimentón y el bouquet garní.

3. Preparar 2 tazas de pico de gallo así: 3 tomates maduros picados con cáscara, 1 cebolla grande picada, la ½ taza de cilantro picado, 3 cucharadas de aceite de oliva, 3 cucharadas de vinagre, sal, pimienta y ají al gusto.

4. Preparar 1 ½ de salsa roja mejicana así: 3 tomates maduros pelados y machacados (prender y apagar la licuadora), ¼ de taza de vinagre, ¼ de taza de salsa de tomate, ¼ de taza de agua, 1 cucharadita de ají, ¼ de cucharadita de pimienta, sal al gusto.

5. A 2 tazas de crema de leche espesa, agregar jugo de limón y una pizca de sal para que quede agria.

6. Desflecar el pollo o partirlo en cuadritos.

7. Licuar el caldo de verduras y servirlo bien caliente. Poner en el plato de cada persona solo el caldo.

8. Colocar en la mesa todos los ingredientes para que cada uno se sirva a su gusto.




5 de septiembre de 2006

Para evitar el mal aliento y el mal olor en las axilas

Playas, descanso, vacaciones, calor, sofocos, calles desiertas después de las dos de la tarde…Por qué tanto alboroto, ¡Es verano! Si es frío, por que hace frío y si es calor porque …Me preocupa más los malos olores por descuido con la salud y por la falta de amor con la comunidad. ¡Uf! El metro. Y ¿Qué me dicen de los autobuses?

No me voy explayar con charlas y cantaletas sobre lo que se debe comer y lo que no se debe, aunque a mis años me está permitido. Esa ventaja tenemos las abuelas. Y para no perderme en mis historias tomen atenta nota de las recomendaciones para esos incómodos olores.

Mal aliento: Cuide su alimentación. Nada de café, ni alcohol ni tabaco, uso del cepillado e hilo dental. Claro que si les digo la verdad, un buen café cae muy bien a ciertas horas, con una buena compañía que puede ser una agradable lectura, ¡Ah! y ver la taza humeante y sentir su aroma es un deleite.

Para aquella cita tan esperada, esa cita romántica masticar cardamomo, hierbabuena, canela o clavos diez minutos antes. Dirán que soy cursi, pero quisiera verlos o verlas si tienen el problema. Recuerden que “por la boca muere el pez”

Otro problemita que se resuelve fácil: el mal olor en las axilas (cante de alerón o chucha como dicen en alguna región de España y otras de Colombia), limón o leche de magnesia. Si es usted persona inquieta averigüe por las investigaciones que vinculan el cáncer de mama con algunos desodorantes que impiden la transpiración.
Por favor, no me deje con la duda y cuénteme los resultados. Y suerte.

Para el mal aliento y mal olor en las axilas

Playas, descanso, vacaciones, calor, sofocos, calles desiertas después de las dos de la tarde…Por qué tanto alboroto, ¡Es verano! Si es frío, por que hace frío y si es calor porque …Me preocupan más los malos olores porque significan descuido con la salud o falta de amor con la comunidad. ¡Uf! El metro. Y ¿Qué me dicen de los autobuses?
No me voy explayar con charlas y cantaletas sobre lo que se debe comer y lo que no se debe, aunque a mis años me está permitido. Esa ventaja tenemos las abuelas.

Recomendaciones para esos incómodos olores:
Mal aliento: Cuide su alimentación. Nada de café, ni alcohol ni tabaco, uso del cepillado e hilo dental. Claro que para que mentir, un buen café, una buena compañía, una agradable charla y lo demás irá llegando.
Y antes que me pierda en mis elocubraciones empiezo, tome atenta nota.

Para aquellas citas citas románticas (aún recuerdo las mías) masticar cardamomo, hierbabuena, canela o clavos diez minutos antes.

Y para otro mal muy frecuente también puedo recordar alguna receta, hablo del mal olor en las axilas (cante de alerón o chucha como dicen en alguna región de España y otras de Colombia, limón o leche de magnesia. Si es usted persona inquieta averigüe por las investigaciones que vinculan el cáncer de mama con algunos desodorantes que impiden la transpiración.
Por favor, después de esa cita tan esperada no deje de comentarme los resultados.

7 de agosto de 2006

Utilice la cáscara de piña

No tire a la basura la cáscara de piña. La trocea y junto con un pedazo de pulpa de la fruta y tres veces la cantidad de Agua la pone al fuego con un puñado de arroz, canela, cuatro clavos y un cuarto de panela o azúcar morena.
Ocúpese de sus quehaceres y cuando se acuerde le echa una mirada con la esperanza de encontrar blanda la cáscara. Si lo considera necesario, le agrega agua y dulce al gusto.
Una vez que esté listo, lo retira del fuego y lo deja reposar un día y una noche. Luego lo pas por la licuadora, lo cuela y deja unas horas en la nevera o frigorífico.
Listo para tomar su delicioso masato.

Utilice la cáscara de piña

No tire a la basura la cáscara de piña. La trocea y junto con un pedazo de pulpa de la fruta y tres veces la cantidad de Agua la pone al fuego con un puñado de arroz, canela, cuatro clavos y un cuarto de panela o azúcar morena.
Ocúpese de sus quehaceres y cuando se acuerde le echa una mirada con la esperanza de encontrar blanda la cáscara. Si lo considera necesario, le agrega agua y dulce al gusto.
Una vez que esté listo, lo retira del fuego y lo deja reposar un día y una noche. Luego lo pas por la licuadora, lo cuela y deja unas horas en la nevera o frigorífico.
Listo para tomar su delicioso masato.

24 de julio de 2006

Patatas o papas rehogadas

Cocina las patatas con piel (si desea, posteriormente la quita), luego las parte en cuatro.
Haga a fuego lento un rehogo con cebolla, tomate, queso y sal algusto y una vez esté listo agréguele las papas y deje diez minutos, siempre a fuego lento.
Pruebe. ¡Qué delicia! Listas para comer en solitario o en compañía.

11 de julio de 2006

Arroz con cilantro

El arroz al igual que el cuscus, facilitan la labor de un cocinero o una cocinera en apuros. La vida moderna, yo no se ya si para bien o para qué, vida agitada, sin tiempo para las largas conversaciones familiares con abuela y abuelo incluídos. Ahora, Nada o muy poco.
Como ven, no pierdo la costumbre de perderme. Quería hablarles o escribirles, ustedes sabrán, sobre el arroz con cilantro. Como todo, muy sencillo después de saberlo.
Pora una cantidad de arroz, pones el doble de agua; tres cucharadas de aceite, sal y un diente de ajo. Con el fuego normal esperas hasta que desaparezca el agua (los paisas de las tierras de Colombia dicen: "hay que esperar a que seque"). Bajas el fuego, tapas la vasija y lo dejas unos 10 minutos.
Agregas una cantidad generosa de cilantro picado, revuelves, tapas tres minutos y listo para que lo acompañes con carne, verdura...¡Buen provecho!

27 de junio de 2006

Un buen sancocho

Me parece que veo a mis amigas de Antioquia diciendo pero si yo hago así y a la otra, yo lo hago asa. La verdad es que cada una ponemos de nuestra parte su toque y su sazón aunque tenga una receta general.
Lo siento pero yo todo lo hago al cálculo. Cuando vivía el abuelo, podíamos estar en casa quince personas para almorzar, eso que en Europa y México dicen comer, y otras, sólo estábamos él y yo.
Se los voy a contar pensando en cuatro personas.
Ocho tazas grandes de agua, un kilo de carne de falda en trozos grandes y cebolla en rama picada y sal. Lo pones al fuego máximo 15 minutos, luego media hora a fuego lento.
Pasado ese tiempo tendrás listo tres plátanos machos y verdes, picados (con la mano, nada de cuchillo), dos yucas medianas en trozos y finalmente cuatro papas medianas en trozos. Aumentas unos quince minutos al fuego y luego, nuevamente, fuego lento.
Pasada media hora agregas cuatro mazorcas de maíz en trozos.
Una vez esté blando todo esto que en Colombia llaman los paisas revuelto, se agrega cominos, azafrán y un poco de pimienta y dejas un rato para coger el sabor.
Aparte haces un rehogado con cebolla en rama, tomate, pimentón. Lo puedes dejar en la mesa para que cada persona ponga en su plato al gusto o juntarlo de una vez con el sancocho.
Aparte, picas cilantro que se mezcla en cada plato.

Se sirve todo junto y se le puede dar un toque con una gotas de limón y acompañar de aguacate o repollo picado muy fino con sal y limón.
Para unas buenas ganas de sancocho no importa el calor o el frío. ¡Buen provecho! Y si nunca los has preparado, lánzate a la tarea. Me superarás, estoy segura.

20 de junio de 2006

Para suavizar las penas

Si una pena profunda te invade, te acompañará a donde vayas. Quizá unos días de soledad ayuden pero no muchos porque a lo mejor es la via a la depresión.
Las amigas o amigos son un buen bálsamo al igual que un buen brandy. Te sube la presión
y le pone una chispa a tu tristeza.
Caminar, recibir el sol en las horas adecuadas (hasta las doce del día y depués de las cuatro de la tarde, dicen los expertos)para que las llamadas hormonas de la alegría respondan a las súplicas de tu corazón.

13 de junio de 2006

La abuela de Extremadura

Cuenta la abuela María José

"En mi pueblo se guardaban los lutos de una manera tan rigurosa que resultaba exagerada. En Extremadura era y sigue siendo tradicional hacer unos dulces típicos en Semana Santa, se llaman "bollas", caseras, riquísimas, con harina, huevo, aceite de oliva, azúcar y los rellenos de cabello de ángel, de almendras, de mermeladas caseras de tomate, melocotón, melón.... Las que se rellenan son las empanadillas. Esto en plan dulce. Luego también se hacían para los hombres otras empanadillas gigantes, que se llaman "hornazos", rellenas de chorizo, éstas se las llevaban al campo para almorzar, eran auténticas bombas energéticas. Se hacían en cada casa y participaban todas las mujeres de la familia, en torno a la mesa camilla, eran reuniones entrañables y divertidas, allí se podían oir todos chismes y los disparates posibles. Por la mañana se preparaba la masa, que era un trabajo para forzudas, todo a base de puños hasta que la masa "casaba". Se dejaba reposar en un barreño de barro durante horas y ya por la noche después de la cena era cuando todas nos poníamos a preparar las bollas, teníamos moldes de diferentes formas, de corazón, de estrella, redonda con hueco en medio, los de las empanadillas..., las íbamos colocando en latas, que eran las que luego iban al horno. Las bollas eran cubiertas con adornos tipo clara de huevo batida y azúcar, confites de colores.... Una que nos gustaba hacer en especial era la llamada "pavita", se hacía con formas inventadas, casi siempre de lagarto y encima se ponía un huevo cocido, que se sujetaba al lagarto con dos tiras cruzadas de masa. Quedaba preciosa. Luego el domingo de resurrección y el lunes de pascua, que era cuando se salía al campo a pasar el día (se llama "ir de gira"), la broma era cascarle el huevo en la cabeza al que anduviera más despistado.
El caso es que en las casas donde había un luto, esta tradición no se cumplía, se suponía que era algo lúdico y en una casa de luto todo tenía que ser tristeza. Entonces, para que esas familias no se quedaran sin comer sus bollas, las vecinas les mandaban unas cuantas. Yo me acuerdo de chica haciendo el reparto que me mandaba mi madre, en un plato se ponían diez o doce piezas variadas, se tapaban con una servilleta y hala, a casa de la fulanita o la menganita, a decir: que de parte de mi madre aquí le traigo unas bollas para que las prueben, era como un disco rallado. Entonces la fulanita te daba las gracias y unas pesetillas de propina. A mí me daba mucha vergüenza ir a las casas, pero no me quedaba otra porque le tocaba impepinablemente a la más chica de la casa, así que mi hermana se salvaba.

7 de junio de 2006

Las abuelas somos mujeres

Cuando somos abuelas por primera vez, nos encontramos ante un choque emocional: la felicidad y el cambio de condición que imponen las circunstancias. Es social, es familiar y desde luego, soy yo y lo que familia y sociedad me han dado.
Esa cognotación de abuela parece que nos hace mayores, no importa que edad tengamos, parece que dejamos de ser sujetas de deseo o que ya no cuentan para nosotras, que debemos entrar en el terreno de la "total disponibilidad" para las y los otros. Y ¿Qué hemos hecho hasta este grato momento?
Permítanme decirles hijos, hijas, nietos, nietas y toda esa querida vecindad, me gusta ser abuela para disfrutar por momentos o por cortos periódos; quiero transmitir alegría y mis conocimientos y experiencia, me gusta colaborar pero no abusen de mi tiempo.
Llegamos a una edad en la que deseamos vivir y cumplir sueños que dejamos aparacados; alguna de mis amigas quiere viajar y les aseguro que siendo realistas, no nos queda todo el tiempo del mundo; otra se apasiona con la escritura. Tiene mucho que contar y enseñar, es memoria, es historia; Concha, siempre deseó estudiar y ahora se dispuso a aprender informática. Su deseo es comunicarse con el mundo. Y así, Pilar, María, Almudena, Juana...
Yo, quiero ser solidaria sin dejar de pensar en mí. ¿Es tan difícil de entender? No quiero que decidan por mí. "Llevo a mi madre, la traigo, la dejo..." "Mamá esto no te conviene, mamá por qué..."
Quiero que respeten mis decisiones y mi independencia que mucho me ha costado.
Y como pueden leer, hoy me alejé de mis tradicionales consejos para recordarles que las abuelas somos experiencia, ternura y no sé cuántas categorías más...No lo olviden: Somos mujeres.

29 de mayo de 2006

Variedad para un día especial



En mi últimos cumpleaños recibí una grata sorpresa. Mientras que una hija insertaba el orificio de un cd en una cadena de música para que sonaran "Las mañanitas", un hijo tocaba en la puerta de mi habitación para aparcer ante mis ojos con una bandeja: jugo de naranaja y una taza de café. Era mi cumpleaños.
Me incorporé y aún arropada por una sábana cumplí alegremente con el ritual de quedarme un cuarto de hora metida en la cama.
Luego me enteré que tenía el mejor orden del día que fecha alguna me impusiera. Todo ocurrió en casa, sólo que la familia amplio los mimos de cada día. Estoy feliz de cumplir y me agrada que la felicidad de vivir, sea compartida.
8:15 Las mañanitas
8:30 Desayuno
10:00 Lectura del periódico y chismes varios.
11:00 Baño de rosas.
12:00 Masajes.
13:00 Película
15:00 Comida, café y copa
17:00 Siesta
19:00 Abierto al público

Cuando cayó el sol, mis amigas y unos cuantos amigos aparecieron con velas de colores y flores rojas, rosadas, amarillas...

22 de mayo de 2006

Dulce de limón

Dicen que al mal tiempo buena cara. Algo parecido podríamos decir: un poco de dulce para la acidez.
El jugo de dos limones
Medio kilo de azúcar morena o media panela
Dos claras de huevo
Ponga al fuego el jugo del limón con el azúcar a la panela. Con una cuchara de madera, meneé hasta que el melado esté listo
Aparte bate las claras de huevo a punto de nieve en una vasija de cristal o de esmalte. Poco a poco mezcla el melado con la nieve sin dejar de revolver en forma circular. La dureza del dulce dependerá del tiempo que dure el proceso de batido.

Mi abuela preparaba el dulce con azúcar blanca -De eso hacen ya...Francamente no recuerdo cuántos años-. Pero bueno, lo que quería decirles es que hoy los estudiosos de la salud no la recomiendan, digo esa azúcar, por sus componentes químicos.
¡Buen provecho!

15 de mayo de 2006

¿Pesadez en las piernas?

En Europa llegó la primavera y poco a poco el calor insportable en la región mediterránea.
Empiezo a escuhar la queja por la pesadez o el dolor en las piernas. Amigas y amigos, no necesitan tomar nota, sólo tenerlo en cuenta.
Alguna vez les recomendé el tubérculo para...¿Lo recuerdan? Ahora les sugiero la cáscara.
Pueden hervir la cáscara de no menos de cinco patas. Una vez esté fría, tenga sus piernas largo rato (el que pueda) dentro del agua. ¡Buen provecho! Y no deje de contarme los resultados.

*** *** **** *** *** *** *** **** ****

Y si no sufre de alergía, váyase al campo, contemple la orgía multicolor que nos regala la naturaleza después de ver los árboles desnudos.
Quizá le convenga un orgasmo visual después de tanto correr, de tanto ajetreo cotidiano, tanto desengaño o tanta necesidad de paz espiritual.

8 de mayo de 2006

Extremeña escribe a la abuela: También para el dolor de cabeza

Abuela el remedio de la patata para el dolor de cabeza me trae a la memoria una imagen que yo veía en mi pueblo extremeño cuando era chica: las mujeres mayores sentadas en las puertas de sus casas, todas vestidas de negro de los pies a la cabeza, con sus sayas anchas y sus pañuelos negros a la cabeza, por eternos lutos que se encadenaban unos con otros. En sus sienes, mitades de habas secas, que imagino se pegaban con saliva, ese era su remedio para el dolor de cabeza.

1 de mayo de 2006

Mis manos lo merecen

Trabajamos mucho y las manos se ocupan de buena parte de cualquier actividad, pero las cuidamos poco. Con el paso de los años, llegan las canas, las arrugas, la piel se reseca poco a poco. Es natural.
Pero mi recomendación amigas y amigos -porque unas y otros deben cuidarse, es señal de quererse- es estar sanos con eso que siempre decimos las abuelas: comer bien, dormir lo que cada quien necesite, descansar, no olvidarse del derecho al ocio y la pereza pero también ayudarse para verse bien ante los ojos y el espejo.
No me enrollo más. Decía...¿Ah! sisisi, de cuidarse las manos.
Tomen nota, es muy sencillo.
Una cucharadita de azúcar (ojalá morena) con la crema que utilizan a diario para las manos. Frotan suavemente durante unos minutos hasta los codos. Enjuagar y luego, sentir la suavidad.

24 de abril de 2006

Para vosotras, cuscús

Muy poética Farida Khataf, presentó en el espacio Maria Zambrano como aprendió a preparar de su abuela argelina, el cuscús

Hemos fusionado sabores y olores,
ancestrales pero sobrevivientes.
Convivencia de especies exóticas,
en una fuente de ercilla cálida,
ofrecida a paladares y miradas
abiertas a lo extraño, a lo nuevo.
Metemorfosis de la sémola,
en pasta untada con mantequilla
donde acunan legumbres y verdura multicolores.
La canela aprieta la mano a la pimienta,
y el garbanzo resbala al ver manar a
borbotones el aceite de oliva virgen.
Un plato bautizado cuscús
más que plato tradicional,
esencia de mujeres púdicas y sensuales,
presente siempre en ceremoniales

17 de abril de 2006

Para las plantas

Las plantas como tú o como yo, necesitan mucho cariño.
Me preguntarás cómo hacen las que crecen silvestres. Muy
sencillo, o están lejos de los atentados contra la naturaleza
o no les queda otro camino que hacerce fuertes.
Pero a lo que vamos.
El pasado fin de semana me visitaron tus amigas Concha, de Ciudad
Real, y Anita de Getafe. Les prometí que contaría mi sencillo
tratamiento para las plantas.
Como en los viejos tiempos, no tires las cáscaras de huevo,
las trituras y la revuelves con la tierra. Tus plantas te lo
agradecerán.
Y como supongo que tomarás unas ricas tazas de café caliente, humeante
-como aquellas que tomamos cuando abrieron este blog-, pues haces igual
que con los huevos, no tires nada.
El ripio del café también lo puedes regalar a tus plantas.
Hasta pronto y que prospere tu jardín.

Para las plantas

Las plantas como tú o como yo, necesitan mucho cariño.
Me preguntarás cómo hacen las que crecen silvestres. Muy
sencillo, o están lejos de los atentados contra la naturaleza
o no les queda otro camino que hacerce fuertes.
Pero a lo que vamos.
El pasado fin de semana me visitaron tus amigas Concha, de Ciudad
Real, y Anita de Getafe. Les prometí que contaría mi sencillo tratamiento para las plantas.
Como en los viejos tiempos, no tires las cáscaras de huevo, las trituras y la revuelves con la tierra. Tus plantas te lo agradecerán.
Y como supongo que tomarás unas ricas tazas de café caliente, humeante -como aquellas que tomamos cuando abrieron este blog-, pues haces igual que con los huevos, no tires nada.
El ripio del café también lo puedes regalar a tus plantas.
Hasta pronto y que prospere tu jardín.

11 de abril de 2006

Cuando tenemos prisa

Hoy tener tiempo es un lujo, por eso quiero recomendarles una comida rápida sin que sea gringa.
Quizá el nombre no guste a alguna gente, pero ni modo, así se llama: sudado.
Carne, la que se vaya a comer
papas o patatas y yuca (y se lo desea, un plátano macho maduro)
Zanahoria, cebolla, tomate, sal, cominos y azafrán.
Pónagalo todo en trozos en una olla con una taza de agua. Déjelo en el fuego hasta que esté blando. Tarda muy poco tiempo.
Puede comer y salir corriendo o terminar lo que tiene pendiente.
Eso sí, procure descansar más tarde.

3 de abril de 2006

Para cabello seco y maltratado

No piensen que se trata de una propaganda pagada. No, no. Usted misma...o usted amigo puede cuidar la plantita que tanto recomiendo. Sisisisisisi, no digo nada extraordinario, nada que no me haya enseñado el tiempo y la vida.
El asunto es sencillo: A una hoja grande de sábila (aloe vera) le extrae la pulpa -parecen cristales- y hace un batido con dos huevos.
Después de pasarlo por el cabello póngase a hacer la tarea que tiene pendiente en casa y después de dos horas, se da un buen baño.
Espero me cuente los resultados la próxima semana

27 de marzo de 2006

Para el dolor de cabeza

Decía Ramón, ese amigo suyo que parece que sabe de todo, que la palabra papa es quechua, y que los españoles la confundieron con la batata que conocieron en Haití. También me contó que en Irlanda, después de tres semanas de lluvia, entre 1845 y 1851, murió un millón de personas...Y ¿sabe por qué? Porque la gente se quedó sin papa para comer.
Pero hoy no vamos a hablar de cosas tristes. Déjeme que recomiende la papa contra el dolor de cabeza. Ponga atención mija:
Unas rodajas de papa sobre la frente y la sien, bien sujetadas por un pañuelo o un paliacate. Una vez se calientan, se cambian por otras frescas.
No tiene contraindicaciones.
Hágalo y me cuenta cómo le va a usted o a la gente que lee su...¿cómo me dijo que llama?
-Blog, abuela, blog.
-Pues eso, que le digan si les sirvió o no.

20 de marzo de 2006

Para la cruda, guayabo o resaca


Para esos males buscados les puedo recomendar hervir una taza de agua con dos cucharadas de linaza, conocida también como lino.
Bébanla con el fervor del que se ha pasado de copas por celebra sus 15, 30, 50 o sesenta tacos, por creer que matará una pena o exagerar una alegría. Por la razón que sea.
Y como sé que no van a dejar de beber (así sea de vez en cuando), entonces utilicen la misma agüita para mejorar la flora intestinal, pero mucho mejor si la dejan al sereno y la toman en la mañana.
¡Cuídense!

13 de marzo de 2006

Historias de siempre*

El muchacho tenía muy mal carácter. Su padre le dio una bolsa de clavos y le dijo que cada vez que perdiera la paciencia debía clavar uno detrás de la puerta.
El primer día clavó 37 clavos.
A la semana siguiente, a medida que aprendía a controlar su genio, clavaba menos clavos. Descubrió que era más fácil controlar su genio que clavar clavos detrás de la puerta.
Llegó el día en que pudo controlar su carácter durante todo el día. Después de informar a su padre, éste le sugirió que retirara un clavo cada día que lograra controlar su carácter.
Los días pasaron, y uno cualquiera, el joven pudo anunciar a su padre que no quedaban más clavos para retirar de la puerta. El hombre un tanto mayor, tomó de la mano a su hijo y lo llevó hasta la puerta. Le dijo:
-Has trabajado duro hijo mío pero mira esos hoyos en la puerta, nunca más será la misma. Cada vez que tú pierdes la paciencia, dejas cicatrices como las aquí ves. Tú puedes insultar alguien y retirar lo dicho y del modo como se lo digas lo devastarás y la cicatriz perdurará.
Una ofensa verbal es tan dañina como una ofensa física. Los amigos son joyas preciosas, además los has elegido tú. Hay que cuidarlos.

*Esta historia se la contó Sophia desde Suiza a su amigo Fernando Más, el periodista Zopilodones. Murió en Madrid, 2003

6 de marzo de 2006

Una buena taza de chocolate

La abuela recuerda que el chocolate es un buen remedio para combatir el frío, para mejorar el ánimo y para mantener un cabello sano.
-¿Cómo se prepara?
-Sencillo, sencillo.
Un cuarto de panela para tres tazas de agua. Póngalo a hervir y cuando esté listo añada unas rajitas de canela, un poco de nuezmoscada rayada, cinco clavos y desde luego seis tabletas de chocolate sin dulce.
Déjelo hervir una vez y bata con molinillo, si, si, de los antiguos que todavía los venden. Regrese la vasija al fuego y bata de nuevo después de que suba. Repita por tercera vez la operación.
-Abuela, ¿por que debe hervir tres veces?
-Pa´que no le duela el estómago.
Sólo queda que lo sirva con unas ricas arepas y si lo prefiere, pues pan.
-Yo sé que venden un buen chocolate para hacerlo como a mí me gusta, en Colombia y en Galicia.

27 de febrero de 2006

Bailar y bailar

Las exigencias a las cuales estamos sometidas conducen a la ya conocida frase: “tengo un cansancio…” o “¡Qué estrés!” Sólo pronunciarlas en voz alta significa el reconocimiento de un estado y el anuncio de una necesidad: no hay salud corporal ni mental.
En medio de tanta exigencia externa, el deseo de cumplir una meta o responder al trabajo cotidiano hace olvidar a hombres y mujeres que “mi cuerpo también se llama yo” y que sufre las duras jornadas a las que lo sometemos, aunque lo más lamentable es que no lo conocemos y olvidamos que la afección de una parte tiene efectos en el todo.
En nuestro cuerpo cargamos toda la inflexibilidad que acumulamos a lo largo de nuestra vida.
Me leyó unas palabras de Wilhelm Reich, en su libro Función del orgasmo, “Toda rigidez muscular incluye la historia y la significación de su origen. Su disolución no sólo libera la energía (…) sino que también trae a la memoria la situación infantil en que se ha producido la inhibición”.
Mi abuela, descubrió recientemente a Reich y la tiene dándole vueltas la cabeza. Es una buena lectora, pero además tengo la fortuna que comparte conmigo sus inquietudes.


-No conocemos nuestro cuerpo -dice la abuela- no lo tocamos. Se nos ha prohibido y no lo mimamos, pero para estar bien es preciso que él esté bien, y una manera sencilla, fácil y placentera es bailar y bailar, así baile sola: concentrarnos en las sensaciones que bailar despierta, cerrar los ojos, relajarnos, mover nuestros músculos, dejarnos llevar por la música, lo que según Osho puede hasta permitir la meditación. Yo bailaba con mis hermanas y cuando tu abuelo estaba de buenas pulgas, pués con él.

- Abuela, en muchos países existe una patriarcal costumbre: las mujeres esperen que las “saquen a bailar”, como si no fuese un deseo y un derecho que se puede conceder, y dejamos que los hombres escojan como si de una vitrina se tratase.

- Mija, las mujeres debemos aprender que si él puede escoger, yo también puedo escoger a alguien o bailar sola para hacer del baile un disfrute y una terapia.

-Abuela, ¿tuvo problemas en su juventud por la forma de bailar?

- Donde viví cuando su madre era pequeña no. Los negros no tienen esos prejuicios, pero luego en otras ciudades sí.

- Se lo pregunto porque el baile y la sensualidad siempre han marchado juntos.

- Y ¿quién dijo que debemos separarlos? Debemos dejar de lado esa dureza que tenemos con nuestro cuerpo. Frente al espejo lo único que se nos ocurre es: “Qué barriga tengo”, “cómo tengo de estrías”, “si tuviese un poco más de…”.

Disfrutemos del baile, solas o acompañadas y, como Isadora Duncan, trastoquemos los cánones, reivindiquemos nuestro cuerpo, nuestra feminidad, y olvidemos la belleza perfecta que corresponde a la oferta y la demanda.

20 de febrero de 2006

Aprender de la naturaleza

-Mija, le veo un poco encorvada la espalda. Sabrá que tenemos la tendencia a acumular una buena parte de nuestras emociones en esta zona. Es como si pensáramos que esa parte del cuerpo es un saco o costal y ahí va todo lo negativo.
No se complique la vida, observe la naturaleza, ella es sabia y le da un descanso que no le proporciona tanto negocio y artilugios que anuncian por ahí.
Camine descalza para que descargue y reciba de la tierra, descanse su espalda acostada sobre la arena o el césped, mire el cielo y juegue con las nubes. Siga el proceso de las semillas y fíjese que el crecimiento va a su ritmo; sienta e interiorice la corriente del río y déjese llevar...

13 de febrero de 2006

¿Sobre sexo?

-¿Qué lees abuela?
-Mija, algo que debiera estar leyendo usted y no yo. Antes no tenía tiempo para estas cosas porque, fíjese, el cura decía que era pecado, a los papás y a las mamás les comía el coco con tanta tontería...
-Estoy curiosa abuela, me deja ver lo que lee.
-más bién escuche:
"Para Reich, la energía sexual era la energía más sublime, y la libertad sexual, la más elevada de todas las aspiraciones".
Fíjese mija que para este señor -que apenas conozco ahorita-, la persona saludable es la que se dedica con regularidad a un intercambio sexual amorosamente libre de inhibiciones...Menos mal, y a pesar de los pesares, no tengo de que quejarme.

6 de febrero de 2006

Descanse mija, descanse

Mija, descanse. ¿Por qué le cuesta tanto hacer pereza?
Yo trabajo desde que me conozco. Mi papá decía que "la pereza es la madre de todos los vicios".
Yo me pregunto ahora, ¿qué tiene de malo tener algún viciecito?
No somos diosas, no somos perfectas. Descanse mija. ¡Qué viva la pereza!

30 de enero de 2006

Caminar y caminar



En el campo, en El Retiro, en la montaña o en el pueblo, la abuela recomienda caminar y caminar para la salud física, mental y del alma.

23 de enero de 2006

La constancia

Los años van dando calma, o ese es el caso de mi abuela que ante la impaciencia de hijos y nietos no se cansa de repetir:
-Mijitos, por qué tanta prisa. Relájese e insista que "la constancia vence lo que la dicha no alcanza"

16 de enero de 2006

Los refranes de la abuela

El pasado viernes, en medio de mi urgencia cotidiana hice varias preguntas a mi abuela. Se puso el abrigo y me invitó a salir al parque.
Caminamos una calle sin pronunciar palabra, miró al cielo con una luna rodeada por varios círculos, sus casas, según ella, y sin mirarme, dijo:

-La paciencia es amarga pero da frutos.

Me quedan mis dudas. ¿La sóla paciencia? Esperaré. Hacía demasiado frío para...

11 de enero de 2006

Para la garganta

Dice mi abuela que para ese malestar de garganta nada mejor que un quemadito de ron. ¿Cómo se prepara?
A una copa de ron le pasas una cerilla hasta que salga el fuego.
Aparte calientas el zumo de un limón.
Revuelves las dos sustancias con una cucharada de miel de abejas.
Te lo tomas y guarda la botella para otro día.
Si lo deseas puedes escribir otro final.